Para algunos autores, seres no humanos han podido realizar obras para el desarrollo del hombre a lo largo de la historia, tal es el caso de Erich von Däniken , Sitchin Zecharia , Robert KG Temple , y David Icke, para sustentar esto se basan en los hallazgos arqueológicos anacrónicos, leyendas, etc.
Francis Crick, el co-descubridor de la estructura de doble hélice del ADN está firmemente convencida de en lo que él llama panspermia el concepto de que la tierra estaba “sembrado” con la vida, probablemente en forma de algas verde azuladas, de especies extraterrestres inteligentes, con el fin de garantizar la continuidad de la vida, y que cabe la posibilidad de que haya sido realizado
lo mismo en otros planetas, la teoría la expone en su libro la vida misma.
En su libro de 1966 de vida inteligente en el Universo, los astrofísicos IS Shklovski y Carl Sagan dedican un capítulo a los argumentos, que los científicos e historiadores deben considerar seriamente, de la posibilidad de contactos con extraterrestres ocurrieron en el pasado, pero también realzan en que estas ideas son especulativas y no probadas.
Erich von Däniken asevera que algunos artefactos y construcciones monumentales requieren una capacidad tecnológica más sofisticados en su construcción a la que estaba a disposición de las antiguas culturas que las construyeron, y que el arte antiguo alrededor del mundo, así como la iconografía se han referido como narraciones de objetos voladores, además ha hablado sobre la tapa del sarcófago del gobernante de Palenque recuperado de la época Clásica maya, Pacal . Von Däniken afirmó el diseño representa un astronauta sentado, mientras que la iconografía y de acompañamiento texto maya lo identifica como un retrato del propio gobernante con el Árbol del Mundo de la mitología maya.
Se han identificado en las tradiciones orales y escritas de la mayoría de las religiones que contienen referencias a los visitantes extranjeros en el camino de las descripciones de las estrellas y los objetos de vehículos que viajan a través del aire y el espacio.
Sitchin Zecharia, en su libro la serie Crónicas de la Tierra, Expone su teoría de que los dioses de la antigua Mesopotamia, eran en realidad los astronautas del mítico planeta ” Nibiru “, y que los sumerios creían que un mando a distancia” planeta 12 ” asociado con el dios Marduk . Según Sitchin, Nibiru sigue a la órbita de nuestro Sol en una órbita alargada de 3.600 años. Sitchin también sugiere que el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter es el destrozados restos del antiguo planeta ” Tiamat “, que según él fue destruido en una de las órbitas de Nibiru a través del sistema solar, pero la moderna astronomía no ha encontrado evidencia que apoye las afirmaciones de Sitchin.
y que Anunnaki , de Nibiru, vino a la Tierra hace 400.000 años, aproximadamente, con la intención de obtener materias primas, especialmente el oro, para el transporte de vuelta a Nibiru, y crea el homo sapiens sapiens para hacer la tarea: la ” Adapa “(modelo de hombre) o Adán de la mitología posterior. Sitchin afirma que los Anunnaki se ocupaban en los asuntos humanos hasta que su cultura fue destruida por las catástrofes globales causadas por el abrupto final de la última edad de hielo hace unos 12.000 años. Al ver que los seres humanos sobrevivieron y todo lo que había construido fue destruido, los Anunnaki decidieron dejar la Tierra después de dar a los seres humanos la oportunidad y los medios para gobernarse a sí mismos.
Robert Temple en su libro, El Misterio de Sirio afirma que el pueblo Dogon en el noroeste de Malí conservan una cuenta de la visita extraterrestre de hace 5.000 años, y lo sostiene en su conocimientos astronómicos y semejanzas culturales con el antiguo Egipto y Sumeria. Su trabajo se basa en gran medida en los estudios de los antropólogos culturales Marcel Griaule y Germaine Dieterlen.
Los partidarios de la idea de que los antiguos mitos de creación de los dioses que descienden de los cielos a la Tierra para crear o instruir a la humanidad sugieren que en realidad son representaciones de visitantes extranjeros, y máquinas voladoras a veces se menciona en los textos antiguos, un ejemplo es el Vimanas , mitológicas máquinas voladoras que se encuentran en epopeyas hindúes.
En varios capítulos del Antiguo Testamento, Dios es representado como viajando en una columna de humo y / o fuego y haciendo el sonido de una trompeta. En estas descripciones también se describe a Yahvé como tener una presencia física, y no que una abstracción. En la Biblia del Antiguo Testamento , el Libro de Ezequiel habla de un objeto volador visto como un torbellino de fuego que, cuando descendió a la tierra le dio la apariencia de estar hecho de metal. Se describe entre otras cosas, como una rueda dentro de una rueda con cuatro ocupantes, “seres vivos”, cuya imagen era la del hombre. Von Däniken se refiere a la visión de Ezequiel , lo que sugiere había visto una nave espacial.
En el libro del Génesis , Génesis 6:1-4 dice que “Cuando los hombres comenzaron a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas a ellos, los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, y las tomaron como esposas … Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después, cuando los hijos de Dios vinieron a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos con ellos”.
Además, las características del Arca de la Alianza y el Urim y Tumim se identifican como de alta tecnología que sugiere, tal vez de origen extraterrestre. [36]
El apócrifo Libro de Enoc habla de similares objetos voladores y seres llamados “los Vigilantes” que se han amotinado en el “cielo”.
Otro apoyo artístico de la teoría del antiguo astronauta ha sido buscado en Paleolítico pinturas rupestres . Wondjina en Australia y Val Camonica en Italia se afirma que se parecen a presentar astronautas de hoy en día.
La evidencia de antiguos contactos se afirma que incluyen la existencia de monumentos antiguos y megalíticos, así como ruinas como las pirámides de Giza de Egipto, Machu Picchu en Perú, o de Baalbek en el Líbano , y los Moai de Isla de Pascua. Los partidarios sostienen estas estructuras de piedra no pudo haber sido construido con las capacidades técnicas y herramientas de la gente de la época y sostienen además que muchos de ellos no se podría duplicar hasta hoy. Sugieren que el gran tamaño de las piedras de construcción, la precisión con que fueron establecidas, y las distancias muchas fueron transportados deja abierta la cuestión de quién construyó estos sitios. Estas afirmaciones son categóricamente rechazadas por la arqueología convencional.
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Las figuras Dogu
Otros:
Sistema para encontrar vida en otros planetas
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lo mismo en otros planetas, la teoría la expone en su libro la vida misma.
En su libro de 1966 de vida inteligente en el Universo, los astrofísicos IS Shklovski y Carl Sagan dedican un capítulo a los argumentos, que los científicos e historiadores deben considerar seriamente, de la posibilidad de contactos con extraterrestres ocurrieron en el pasado, pero también realzan en que estas ideas son especulativas y no probadas.
Erich von Däniken asevera que algunos artefactos y construcciones monumentales requieren una capacidad tecnológica más sofisticados en su construcción a la que estaba a disposición de las antiguas culturas que las construyeron, y que el arte antiguo alrededor del mundo, así como la iconografía se han referido como narraciones de objetos voladores, además ha hablado sobre la tapa del sarcófago del gobernante de Palenque recuperado de la época Clásica maya, Pacal . Von Däniken afirmó el diseño representa un astronauta sentado, mientras que la iconografía y de acompañamiento texto maya lo identifica como un retrato del propio gobernante con el Árbol del Mundo de la mitología maya.
Se han identificado en las tradiciones orales y escritas de la mayoría de las religiones que contienen referencias a los visitantes extranjeros en el camino de las descripciones de las estrellas y los objetos de vehículos que viajan a través del aire y el espacio.
Sitchin Zecharia, en su libro la serie Crónicas de la Tierra, Expone su teoría de que los dioses de la antigua Mesopotamia, eran en realidad los astronautas del mítico planeta ” Nibiru “, y que los sumerios creían que un mando a distancia” planeta 12 ” asociado con el dios Marduk . Según Sitchin, Nibiru sigue a la órbita de nuestro Sol en una órbita alargada de 3.600 años. Sitchin también sugiere que el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter es el destrozados restos del antiguo planeta ” Tiamat “, que según él fue destruido en una de las órbitas de Nibiru a través del sistema solar, pero la moderna astronomía no ha encontrado evidencia que apoye las afirmaciones de Sitchin.
y que Anunnaki , de Nibiru, vino a la Tierra hace 400.000 años, aproximadamente, con la intención de obtener materias primas, especialmente el oro, para el transporte de vuelta a Nibiru, y crea el homo sapiens sapiens para hacer la tarea: la ” Adapa “(modelo de hombre) o Adán de la mitología posterior. Sitchin afirma que los Anunnaki se ocupaban en los asuntos humanos hasta que su cultura fue destruida por las catástrofes globales causadas por el abrupto final de la última edad de hielo hace unos 12.000 años. Al ver que los seres humanos sobrevivieron y todo lo que había construido fue destruido, los Anunnaki decidieron dejar la Tierra después de dar a los seres humanos la oportunidad y los medios para gobernarse a sí mismos.
Robert Temple en su libro, El Misterio de Sirio afirma que el pueblo Dogon en el noroeste de Malí conservan una cuenta de la visita extraterrestre de hace 5.000 años, y lo sostiene en su conocimientos astronómicos y semejanzas culturales con el antiguo Egipto y Sumeria. Su trabajo se basa en gran medida en los estudios de los antropólogos culturales Marcel Griaule y Germaine Dieterlen.
Los partidarios de la idea de que los antiguos mitos de creación de los dioses que descienden de los cielos a la Tierra para crear o instruir a la humanidad sugieren que en realidad son representaciones de visitantes extranjeros, y máquinas voladoras a veces se menciona en los textos antiguos, un ejemplo es el Vimanas , mitológicas máquinas voladoras que se encuentran en epopeyas hindúes.
En varios capítulos del Antiguo Testamento, Dios es representado como viajando en una columna de humo y / o fuego y haciendo el sonido de una trompeta. En estas descripciones también se describe a Yahvé como tener una presencia física, y no que una abstracción. En la Biblia del Antiguo Testamento , el Libro de Ezequiel habla de un objeto volador visto como un torbellino de fuego que, cuando descendió a la tierra le dio la apariencia de estar hecho de metal. Se describe entre otras cosas, como una rueda dentro de una rueda con cuatro ocupantes, “seres vivos”, cuya imagen era la del hombre. Von Däniken se refiere a la visión de Ezequiel , lo que sugiere había visto una nave espacial.
En el libro del Génesis , Génesis 6:1-4 dice que “Cuando los hombres comenzaron a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas a ellos, los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, y las tomaron como esposas … Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después, cuando los hijos de Dios vinieron a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos con ellos”.
Además, las características del Arca de la Alianza y el Urim y Tumim se identifican como de alta tecnología que sugiere, tal vez de origen extraterrestre. [36]
El apócrifo Libro de Enoc habla de similares objetos voladores y seres llamados “los Vigilantes” que se han amotinado en el “cielo”.
Otro apoyo artístico de la teoría del antiguo astronauta ha sido buscado en Paleolítico pinturas rupestres . Wondjina en Australia y Val Camonica en Italia se afirma que se parecen a presentar astronautas de hoy en día.
La evidencia de antiguos contactos se afirma que incluyen la existencia de monumentos antiguos y megalíticos, así como ruinas como las pirámides de Giza de Egipto, Machu Picchu en Perú, o de Baalbek en el Líbano , y los Moai de Isla de Pascua. Los partidarios sostienen estas estructuras de piedra no pudo haber sido construido con las capacidades técnicas y herramientas de la gente de la época y sostienen además que muchos de ellos no se podría duplicar hasta hoy. Sugieren que el gran tamaño de las piedras de construcción, la precisión con que fueron establecidas, y las distancias muchas fueron transportados deja abierta la cuestión de quién construyó estos sitios. Estas afirmaciones son categóricamente rechazadas por la arqueología convencional.
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